Amado Fuguet V.
Trimestralmente, la empresa Gallup hace un estudio para medir el grado de compromiso o “enganche” con las organizaciones por parte de los trabajadores.
En Estados Unidos, el “engagement”, término original en inglés, es de apenas 29%. Ha estado en alrededor del 30% durante la última década. Esto significa que un 70% no se siente comprometido con la empresa o institución donde trabaja.
Aunque no pueden extrapolarse estos resultados a otras regiones, vale la pena considerar el impacto que tiene la falta de “enganche organizacional”. Las investigaciones de la Gallup reflejan que los trabajadores se sienten menos seguros, su productividad es menor, su orientación hacia el cliente y el logro disminuye, y tienen mayor tentación a dejar la empresa.
Uno de los aspectos que llama la atención es que en la medida en que los trabajadores tienen mayor formación profesional, en esa misma medida tienden a sentirse menos comprometidos con la organización. Esto derrumbaría el mito de que los trabajadores de base son los que sienten menor conexión con la empresa. Y de alguna forma explicaría el porqué las organizaciones tienen cada vez más dificultades para retener al mejor talento, especialmente en países cuyas circunstancias de entorno son poco atractivas para los profesionales de mayor nivel.
Esta circunstancia es de especial cuidado, debido a que los avances tecnológicos y la complejidad de los mercados, hacen que las empresas necesiten de empleados con mayores habilidades y conocimientos.
Y esto evidencia la pertinencia de que las empresas pongan mayor cuidado al clima organizacional, ya que en la medida en que el ambiente laboral es poco apropiado, mayores son las probabilidades de que el personal no se sienta comprometido.
Hola Amado, interesante tu nota. No obstante, mi percepción es que el mundo va hacia la desaparición del empleo tal y como lo hemos conocido. Y la razón es que la única manera de acabar con el feroz desempleo que azota a muchos países, desarrollados y no tanto, será desapareciendo el empleo. Vendrán nuevas formas de relacionarse para el trabajo, el trabajo dejará de ser un instrumento de manipulación política, las personas deberán aprender a trabajar sin emplearse, asumiendo responsabilidades finitas con remuneración acorde. Claro, la legislación de hoy no soporta estos conceptos y tendrá que evolucionar, así como tendrán que evolucionar los políticos y la sociedad entera.
En ese orden de ideas, el engagement con la empresa, que mencionas, perderá también sentido, lo que existirá es el compromiso con la calidad y los resultados buscados y la procura de un bienestar ecológicamente aceptable, viable y, en definitiva, posible.
Un cordial saludo.
Enzo Pittari.
Muy bueno el comentario, le da una perspectiva hacia el futuro al concepto del engagement. Gracias por tu aporte.